Crónicas de un Niño Curioso 1
La curiosidad de un niño es algo maravilloso.
Mi pequeño hermano, en una de sus caminatas silenciosas por la casa ( cuando quiere es un ninja indetectable)
Se materializó a mi lado ligeramente atrás de mi hombro izquierdo, mientras trabaja en mi PC. Para decirme:
«¿Te puedo hacer una pregunta?» [preámbulo a charlas filosóficas que me vuelan la cabeza, desde el momento en que a los 4 años me pregunto que es la física cuántica]
Yo : Claro
Hermanito: «¿Donde está Dios?»
Yo: [Para mis adentros tuve el ardiente deseo de que mi viejo estuviera para explicarle] ¿Para vos en donde está?
H: En el Cielo, me dijeron en la escuela.
Yo: ¿Crees en Dios?
H: Si, ¿vos no?
Yo: Si, pero no en la forma que te dijeron en la escuela
H: ¿Pero donde esta?
Yo: Donde vos quieras que esté
H: ¿Y como se le pide cosas a Dios?
Yo: Podes Rezar o Simplemente querer algo en tu corazón y hablar con él
¿Por que?
H: Por nada.
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Después me enteré que unos de sus amiguitos tiene un hermanito con sindrome de Dawn, y quería pedirle a Dios que no se sienta triste, ni mal. Porque su hermanito se había dado cuenta que era distinto a su hermano…
El lagrimón mas pequeño que me cayó tenía el tamaño de una palta [aguacate]…